El pasado 26 de mayo se realizó la primera reunión del Consejo Asesor del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), presidida por Carlos Pirovano. 

Durante el encuentro, surgieron tensiones que derivaron en un comunicado del Colectivo de Cineastas, en el que se denuncia la imposición, por parte de la presidencia del INCAA, de una visión unilateral sobre las causas de la parálisis de la producción cinematográfica nacional y las formas en que el organismo debería intervenir para revertir la situación.

Los principales puntos del comunicado son:

-Centralización del poder: Se advierte que el presidente del INCAA intenta manipular los marcos legales para vaciar de contenido institucional al organismo, reduciendo los espacios de control y participación a meras formalidades.

-Desconocimiento de los aportes regionales: La presidencia desestimó los planteos de los representantes regionales del Consejo, imponiendo un diagnóstico y una agenda que ignoran la diversidad y complejidad del mapa audiovisual argentino.

-Actitudes autoritarias: Se señala un trato hostil y autoritario hacia las voces disidentes, con un rechazo explícito a toda perspectiva federal e industrialista.

Estas acciones han sido interpretadas por amplios sectores del cine como un intento deliberado de desmantelar los mecanismos democráticos y federales que garantiza la Ley de Cine, poniendo en riesgo el desarrollo de la producción audiovisual en todo el país.